Fire Forward: Construir juntos la resiliencia de los ecosistemas

Fire Forward: Construir juntos la resiliencia de los ecosistemas

ACR publica una nueva investigación sobre el comportamiento de búsqueda de alimento de las garcetas en la bahía de Tomales

Los investigadores de ACR publicaron recientemente, el 31 de diciembre de 2021, los resultados de nuestro estudio sobre las garcetas reales marcadas con GPS que se alimentan en la bahía de Tomales. "Great egret (Ardea alba) habitat selection and foraging behavior in a temperate estuary: comparing natural wetlands to areas with shellfish aquaculture", del que son coautores Scott Jennings, David Lumpkin, Nils Warnock, T. Emiko Condeso y John P. Kelly, aparece en "PLOS One".

Fotografía: Richard James

¿Proporcionan hábitat de alimentación tanto la acuicultura marisquera como los humedales mareales naturales?

A medida que la marea sube y baja de la bahía, las garcetas reales pueden elegir para comer una gran variedad de humedales mareales naturales (como praderas mareales, marismas mareales y marismas sin vegetación) y zonas donde se cultiva marisco con fines comerciales.

La acuicultura de moluscos en la bahía de Tomales es importante para la economía local y proporciona una valiosa conexión con los alimentos producidos localmente. Sin embargo, los organismos que determinan cuánta acuicultura debe permitirse en la bahía, y dónde debe ubicarse, carecen de información sobre cómo podría interactuar la fauna salvaje con estas zonas.

Fotografía: Nils Warnock

Mediante el seguimiento de las garcetas con pequeñas mochilas GPS, descubrimos que las garcetas en busca de alimento preferían los humedales naturales de marea.

Entre 2017 y 2019, colocamos pequeñas mochilas GPS en garcetas para medir si elegían humedales naturales con más frecuencia que zonas de marisqueo para buscar su dieta de peces e invertebrados acuáticos.

Se marcaron 10 garcetas reales y se siguió su alimentación en la bahía de Tomales durante 73-360 días por ave. Tres garcetas marcadas evitaron esencialmente buscar alimento en las zonas de marisqueo. Las siete garcetas restantes utilizaron las zonas de marisqueo, pero sólo cuando estaban justo en el nivel del agua de la marea. Las garcetas evitaron vadear zonas de marisqueo profundas o utilizarlas cuando estaban expuestas por las mareas bajas. Por el contrario, estas garcetas buscaban alimento en los humedales naturales en todas las profundidades de agua a las que podían acceder. Aunque se sabe que las praderas de fanerógamas son un hábitat importante para una amplia gama de especies, comprobamos que todos los tipos de humedales naturales que evaluamos (fanerógamas, marismas mareales y llanuras fangosas) parecen ser igualmente importantes para la alimentación de las garcetas comunes durante todo el ciclo mareal.

Los resultados resumidos serán de gran valor para la futura gestión del hábitat y la conservación

Nuestros resultados sugieren que, aunque las garcetas parecen percibir las zonas de marisqueo como hábitat de forrajeo, esas zonas ofrecen menos oportunidades de forrajeo a lo largo del ciclo mareal que los humedales naturales.

Conclusión para los gestores de recursos naturales y acuicultura: La sustitución de más humedales naturales por la acuicultura de moluscos podría reducir las oportunidades de alimentación de las garcetas y posiblemente alterar las funciones ecológicas de las garcetas como depredadores principales en estos humedales naturales.

Próximos pasos: Estamos compartiendo estos resultados con las agencias y organizaciones de gestión locales (CA Coastal Commission, West Marin Environmental Action Committee, NPS) para ayudarles a gestionar y planificar mejor las acciones humanas en la bahía de Tomales. También estamos estudiando cómo las acciones humanas en la bahía de Tomales (incluida la acuicultura de moluscos, el ocio, etc.) pueden afectar a la calidad del hábitat de la bahía para otras especies de aves.